La remolacha es dulce y deliciosa, visualmente es llamativa por su colorido particular, pero su sabor cautiva aún más por su nivel de dulzura.
Es un tubérculo, crece profundamente, es redondo y carnoso. Su color es rojo por su pigmento betaína soluble en agua.
¿Cómo cocinar las remolachas? Primero, elimine las hojas y sus tallos pero no tan cerca de su base, para evitar que pierdan su colorido y sabor. Después de lavarlas perfectamente, colóquelas en agua hirviendo con sal, tape y deje cocinar por 45 a 60 minutos. Para acortar este tiempo puede cocinar en olla de presión, con el beneficio de lograr preservar de mejor manera sus nutrientes.
Otros métodos son al horno que permite conservar su dulzura o el blanqueado para complementar posteriormente su preparación. Al estar listas o bien cocidas las remolachas se escurren y posteriormente se les retira la piel. Cuando las prepare puede emplear guantes desechables para eviar mancharse las manos.
Cuando compre las remolachas, busque las que tengan sus hojas verdes, estén frescas y firmes. Al ser pequeñas son más blandas y dulces. Si las refrigera, colocque dentro de una bolsa plástica y le durarán una semana. Mientras que hojas, trate de consumirlas en breve, las podrá preparar de igual manera que las acelgas, en guisos, con huevo o como relleno para tartas, entre otras.
Nutricionalmente, estimula el apetito, se digiere fácilmente, contiene pocas calorías, es una buena fuente de folato, una fuente excelente de potasio y vitamina A, por lo que resulta altamente nutritiva.
Las formas de servir son diversas y como cualquier ingrediente en la cocina, con un poco de creatividad, podrá presentarlas de manera diferente y sorprender.
La remolacha cocinada y rallada da colorido a una ensalada o sopa, si la prepara a la parrilla combinada con papa y zanahoria lucirá apetecible y estará crujiente. Para resaltar los sabores acompañe con una vinagreta o un aderezo de yogur con mostaza. Además, de sopas, salsas o incluso en recetas dulces en pasteles o galletas o en jugos.
En esta ocasión les comparto la receta de una sopa de remolacha como una variante de la tradicional borsch rusa.
Necesitamos lo siguiente:
1 libra de carne de res con hueso
3 hojas de laurel
2 papas
Sal al gusto
2 tazas de repollo
4 remolachas
1 cucharada de cebolla
2 dientes de ajo
1 tomate
Perejil
Eneldo
Pimienta negra
Preparación:
Cocinamos la carne en el agua, condimentamos con hojas de laurel. Bajamos el fuego y dejamos cocinar por una hora.
Cuando el caldo esté casi listo, le agregamos las papas cortadas en cubos.
Sazonamos.
Retiramos la carne del fuego, cortamos para eliminar el hueso y regresamos a la olla.
Agregamos el repollo finamente picado y la remolacha cocida y rallada.
Sofreímos cebolla, ajo picados y tomate. Lo adicionamos a la olla.
Rectificamos la sazón, condimentamos con pimienta negra molida y entera, perejil y eneldo fresco.
Dejamos reposar para que adquiera un buen color.
Servimos con crema fresca y espesa.